Universidad Católica saldrá al mercado para buscar portero para el año 2024. 

Faltando apenas cuatro partidos para que termine la temporada 2023, sin duda uno de los puntos que deberá evaluar Universidad Católica para el otro año será la incorporación de un nuevo portero. 

En el arco, la UC deberá evaluar la renovación o no de Nicolás Peranic, la posible nueva salida de Vicente Bernedo y el retorno de Sebastián Pérez en el caso de que Unión Española no haga uso de la opción de compra, escenario que sin duda dará que hablar en este mercado de pases. 

Según dio a conocer hace algunos días Jorge Hevia en Radio Pauta, Cruzados evalúa reforzar el arco con un extranjero, esto aprovechando la ventana que daría las posibles salidas de jugadores como Bryan Rovira, Guillermo Burdisso e incluso Franco Di Santo. 

En este escenario también se podría sumar un portero formado en Universidad Católica que actualmente milita en el extranjero y que no descarta volver a vivir su revancha a la precordillera, en donde lamentablemente nunca tuvo chances en el profesionalismo. 

Se trata de Miguel Vargas, portero de 27 años y que actualmente está viviendo su segunda temporada en el Cienciano de Perú, en donde ha tenido muy buenas actuaciones y que, incluso, lo pusieron en la órbita del combinado peruano hace algún tiempo atrás. 

En conversación con AS Chile en la previa del partido de Chile ante Perú, “Manotas” Vargas recordó su pasado por Universidad Católica, la lucha que tuvo en dicho momento y deja abiertas las puertas para su retorno a la precordillera. 

– Lo quiero llevar a sus inicios en Universidad Católica. ¿Cómo recuerda su debut?

– El debut fue lindo, trabajé mucho para lograr eso y es algo con lo que uno siempre sueña al ser un jugador formado en casa. Es algo que hasta el día de hoy tengo presente, pese a que el resultado no fue bueno, pero ese recuerdo siempre va a estar presente.

– ¿Le quedó la deuda pendiente de no haber podido jugar más en la UC?

– Siento que de todo se aprende, siempre competí de la mejor manera para estar, además aprendí bastante de los arqueros con los que estuve. En ese momento era una competencia dura: estaban Cristopher Toselli, Franco Constanzo y con Matías Dituro también alcancé a compartir después. Sí, sentí que puede haber sido falta de oportunidades, pero me quedo con todo lo que pude aprender de ellos, que me sirvió para día a día poder ser mejor.

– ¿Le gustaría volver en algún momento al club?

– Eso depende del proyecto deportivo y el desafío personal que pueda conllevar. Es un club al que le tengo mucho cariño y con el que estoy agradecido por la formación que me dio.