Uno menos en la lucha por llegar a la precordillera.  

Universidad Católica ya cuenta con cinco refuerzos para la temporada 2023, pero aún espera seguir sumando nombres durante la última semana de diciembre o bien, en la primera quincena de enero.  

Tanto José María Buljubasich como Ariel Holan han reconocido que aún falta reforzar el mediocampo, posición en donde esperan la liberación de un cupo por la nacionalización de Matías Dituro y así, poder apostar por un extranjero en aquella zona.  

El puesto a reforzar es el de interior izquierdo, puesto que quedó vacante tras las salidas de Luciano Aued, Juan Leiva y Yamil Asad, y por lo mismo, Cruzados se puso un ambicioso objetivo, eso sí, finalmente se terminaron bajando de la pelea.  

Según informó Radio Cooperativa, la primera opción para Universidad Católica pensando en el mediocampo fue Bruno Zuculini, volante de River Plate que no logró ser titular durante la campaña anterior y por lo mismo, desde la precordillera se ilusionaban con un préstamo.  

Hubo conversaciones de parte del club con el entorno del jugador, quien se veía entusiasmado con cruzar la cordillera, pero desde River Plate no le hicieron la tarea fácil y en el caso de que Cruzados de verdad quisiera apostar por su carta, le pedían subir la puntería.  

En la precordillera esperaban traer a Zuculini a través de un préstamo, algo que fue rechazado por la escuadra millonaria y solo estaban dispuestos a negociar el pase del jugador a través de una venta, algo que en la UC descartaron rápidamente.  

Según consigna el portal transfermartk, el pase del volante de 29 años está tasado en 1,8 millones de euros, monto inalcanzable para los cruzados, que ya empezaron a reactivar otras opciones.  

Con el pulgar bajado por Zuculini, en Universidad Católica irán por Lucas Menossi, volante que tiene contrato hasta final de año con Tigre, y aunque el jugador espera partir, Cruzados esperará obtener la nacionalización de Matías Dituro antes de concretar cualquier oferta formal.