Tres años después del último capitulo de House of Cards, Kevin Spacey tendrá que hacerse cargo de provocar el final de la serie.
En 2017, el actor nominado al Oscar y que en ese entonces era protagonista de House of Cards, fue acusado de abuso sexual a un menor de edad, situación por la cual fue desvinculado de la serie, la cual finalmente no pudo seguir sin su protagonista.
Esto último volvió a traer a la palestra al actor y la serie, ya que según informó The Hollywood Reporter, Kevin Spacey deberá pagar 31 millones de dólares a MRC (productora de House of Cards), por provocar un abrupto final en la serie, dando como resultado pérdidas monetarias para los realizadores.
Esta denuncia fue acogida por los tribules norteamericanos como un incumplimiento de contrato por parte de Kevin Spacey, ya que no respetó las «directrices, prácticas y políticas de MRC»
Tras la salida de Kevin Spacey, se anunció el abrupto final de House of Cards con una última temporada, la cual tuvo que ser reescrita para ser protagonizada por Robin Wright, dando como resultado una mala temporada final para una de las primeras grandes series originales de Netflix.
En 2017, cuando salieron a la luz los abusos del productor Harvey Weinstein, el también actor Anthony Rapp (Star Trek: Discovery) declaró que en 1986, siendo aún menor de edad, Spacey había acosado sexualmente de él, a lo cual el protagonista de House of Cards reveló ser homosexual para disculparse al respecto, lo cual generó criticas en su contra.
Ese mismo año Netflix informó que Kevin Spacey no seguiría formando parte de la serie, y en 2018 se estrenó Billionaire Boys Club, película que fue grabada antes de la acusación, y que se terminó convirtiendo en el último trabajo como actor de Spacey,