Ex jugador de Universidad Catolica hace un meaculpa respecto a su conformidad y lamenta el no haber buscado la opción de salir antes del club en donde no logró tener la regularidad necesaria.

Fabian Cerda espero recién hasta los 25 años para vivir su primera experiencia fuera de San Carlos de Apoquindo, decisión que hoy, mucho más maduro se arrepiente y hace su meaculpa debido a que vivir en Universidad Católica es como estar en una burbuja.

Desde el debut del actual portero de Curicó Unido siempre tuvo que lidiar con la presencia de Cristopher Toselli, por lo cual jamás logro consolidarse como titular, hecho que estando dentro de Universidad Católica jamás le molestó.

Hoy mucho más maduro, Cerda se arrepiente de no haber salido antes de Universidad Católica, lo cual le imposibilitó saber como era la vida real fuera de San Carlos de Apoquindo.

“Me arrepiento de no haberme ido antes a préstamo. En todas las entrevistas yo siempre he dicho, que uno cuando esta en Católica uno vive en un mundo de Bilz y Pap”, confesó el ex portero de la UC en conversación con Planeta UC.

“Todo pasa porque Cristopher empezó a ser el arquero titular a temprana edad y me tapaba, después cuando se va me traen a Contanzo. Yo creo que de lo único que me arrepiento es de no haber salido antes a préstamo, ahí hubiera madurado antes”, recuerda.

Cerda jamás logro tener continuidad como titular en Universidad Catolica, aparte de la Copa Chile 2011 en donde juega todos los partidos menos la final, aun así, actualmente lamenta que en aquel tiempo se conformaba con ser suplente de Toselli.

“Yo en Católica no me daba cuenta de lo que pasaba, me conformaba estando en la banca, jamás fui más allá. Vivía en el mundo de Bilz y Pap, en Católica lo tenía todo, jamás me faltó nada”, añadió.

De tomas maneras también cuestionó las pocas oportunidades hacia el portero que hay en Universidad Católica, en donde desde el debut de Toselli hace más de una década no hay más guardameta canterano que hayan tenido una cantidad importantes de minutos en el primer equipo.

“Necesitan más rodajes, el arquero se hace formando y eso le hace falta a Católica, que le de más oportunidades y si la embarra un semestre no importa, que lo banquen”, cuestiona Cerda, quien se suma a porteros como Ignacio Hasbun, Miguel Vargas, Andrés Gutiérrez o Gonzalo Mall, arqueros de buen desempeño en las inferiores, pero sin oportunidad en el primer equipo.

“A mi me crucificaron cuando jugamos el clásico ante la U (2014) y perdimos 4 a 2, por comerme el gol de Gustavo Canales en el tiro libre y se quedaron con eso. Al siguiente partido no lo jugué, te van tapando y después nunca más me dieron la posibilidad”, cerró.